El nivel de dolor durante una fajas post operatorias depende del número de sesiones y de la sensibilidad individual del paciente. En general, el drenaje linfático es relativamente indoloro y tolerado.
Por ejemplo, las fajas post operatorias pueden causar cierta incomodidad o sensación de pinchazo leve en el tratamiento, pero se puede utilizar un anestésico tópico o local para minimizar cualquier molestia.
Es importante tener en cuenta que algunos pacientes pueden experimentar cierta sensibilidad o molestia después del tratamiento, como enrojecimiento, hinchazón o sensación de tirantez en la piel. Estos efectos secundarios suelen ser temporales y se pueden aliviar con compresas frías, analgésicos de venta libre o la aplicación de cremas calmantes.
En cualquier caso, es importante hablar con su médico o profesional estético antes del tratamiento para discutir cualquier preocupación o inquietud que pueda tener y asegurarse de que esté cómodo durante todo el proceso.